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Ninguno de los dos habla. Con solo un par de miradas lo decimos todo. Me miras, te miro. Te acercas despacio hacia mí. ¿Y ahora qué hago yo? Estoy confusa, no sé qué hacer, no sé lo que siento.
Me giré, me di la vuelta. Justo en el mismo segundo me arrepentí. Ahora sí que no sabía qué hacer. No sé si hablar merecía la pena, pero estuve callada, creo que ya estaba todo dicho.
Me volví a girar. Estabas con la mirada bajada. Te levanté la cara, y nos miramos.
Y es que no sé lo que sé. ¿Es amor? No.

Cuando algo malo va bien acabará siendo peor.

Cuando pensé que el amor era fácil con la persona a la que quieres me di cuenta más tarde de que no era verdad. Y cuando dije:” ELLA ES UNA AMIGA” también me equivoque. Pues llevo toda mi vida equivocándome de pequeñas cosas que se acumulan poco a poco, y llegará un momento en el que explotaré.
Dicen que nunca te vas a la cama sin aprender algo nuevo, y tú… se supone que eras mi amiga y que podía confiar en ti, y después de todo lo que pasó hoy… ¿no te das cuenta de que aprendiste algo nuevo?¿De qué debes de cambiar de una vez?

DEJA DE PENSAR EN TI, pues no eres el centro del mundo y los demás tienen sentimientos, por ejemplo yo.

EGOÍSTA.

Necesidad y destino.

Lo sé. Él sabe que lo sé. Pero como humana que soy, también necesito que me demuestren que me quieren. Un beso, una caricia, un abrazo, una mirada, un te quiero. No pido nada más.
El destino nos quiere juntos, el único inconveniente es que tú no quieres que lo estemos. ¿Por qué? Eso no lo sé, es algo inexplicable. Lo que sí sé, es que acabaremos o juntos o enfadados. Es el destino y punto. Lo demás son tonterías

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Noche oscura. Me duele todo, noto un grave dolor en la cabeza. Elevo el brazo para intentar contrarrestar el dolor. Enseguida me doy cuenta de que estoy herida, tumbada en la calle, sangrado. Pero tú no apareces, sigues escondido en la más profunda de la nada. Intenté convencerme de que vas a aparecer. Mentir lleva al sufrimiento, mentirse a sí mismo lleva a la locura.